Introducción: El misterioso descubrimiento
Desde tiempos inmemoriales, se ha contado en los rincones más oscuros del pueblo de Lethbridge la leyenda de un túnel que lleva directamente a la oscuridad eterna. Muchos eran los valientes que se aventuraban a buscar esta entrada secreta, pero pocos regresaban para contar la verdad sobre lo que había en su interior. Se decía que aquellos que se atrevían a adentrarse en el túnel jamás volvían a ser los mismos. Y fue precisamente esta historia la que despertó la curiosidad de David, un joven periodista en busca de una primicia que le llevara a la fama.
Nudo: La escalofriante travesía
David había escuchado hablar del túnel hacia la oscuridad desde que era apenas un niño, pero nunca había sentido la necesidad de comprobar si era real o simplemente un cuento de viejas. Sin embargo, algo en su interior le impulsaba a descubrir la verdad detrás de la leyenda, y así fue como una fría noche de octubre decidió emprender su escalofriante travesía hacia lo desconocido.
Con una linterna en mano y el corazón latiendo con fuerza, David se adentró en el bosque que rodeaba el pueblo en busca del túnel perdido. La luna llena brillaba en lo alto, iluminando débilmente su camino entre los árboles retorcidos y las sombras alargadas. El silencio era abrumador, solo interrumpido por el crujir de las ramas bajo sus pies y su propio aliento entrecortado.
Tras horas de búsqueda, finalmente encontró lo que tanto había anhelado: la entrada al túnel hacia la oscuridad. Una abertura estrecha en la roca, apenas lo suficientemente grande como para que pudiera arrastrarse por ella. Sin pensarlo dos veces, David se introdujo en la oscuridad, dejando atrás la seguridad de la superficie y adentrándose en las profundidades de la tierra.
A medida que avanzaba, el aire se volvía cada vez más denso y viciado, haciéndole dificultoso respirar. El eco de sus propios pasos resonaba en las paredes húmedas del túnel, creando una atmósfera opresiva y asfixiante. En determinado momento, David sintió como si algo le observara desde las sombras, una presencia invisible que le helaba la sangre en las venas.
Desenlace: La revelación en la oscuridad
Después de lo que parecieron horas de caminar en la penumbra, David finalmente llegó al final del túnel hacia la oscuridad. Ante él se abría una vasta caverna iluminada por una luz mortecina, revelando una escena que heló su corazón en un instante. En el centro de la caverna se erguía una figura encapuchada, con los brazos extendidos hacia el cielo y los ojos vacíos fijos en él.
El terror se apoderó de David, quien retrocedió lentamente sin apartar la mirada de aquella presencia maligna. Sin embargo, antes de que pudiera dar un paso más, la figura se desvaneció en la oscuridad, dejando tras de sí solamente un eco siniestro y la sensación de que algo antiguo y malévolo había sido liberado en el mundo.
Aturdido y tembloroso, David salió del túnel hacia la oscuridad y emergió en la superficie, donde la luna seguía brillando en lo alto como si nada hubiera ocurrido. A pesar de que logró volver a casa sano y salvo, algo en su interior sabía que ya no volvería a ser el mismo después de esa experiencia en las profundidades de la tierra.
Y así, la leyenda del túnel hacia la oscuridad cobró nueva vida gracias al valiente relato de David, quien decidió nunca revelar completamente lo que había visto en aquella caverna perdida en las entrañas de la tierra. ¿Qué secretos ocultos aguardaban en las sombras? Solo aquellos que se atrevan a adentrarse en la oscuridad podrán descubrirlo, aunque el precio a pagar sea demasiado alto para la cordura humana.