La Voz En El Viento

Desde tiempos inmemoriales, los lugareños de un pequeño pueblo perdido en las colinas de Escocia hablaban de una presencia invisible que habitaba entre la densa niebla que envolvía los campos al anochecer. Se decía que una voz misteriosa se escuchaba susurrando entre los vientos, clamando por atención, por compañía, por almas dispuestas a dejarse llevar por sus oscuros designios. Este relato comienza en una fría noche de octubre, cuando los habitantes de este remoto lugar sintieron la presencia de algo más allá de lo tangible, algo que solo podía ser descrito como «La voz en el viento».

Una joven llamada Elena, de cabellos oscuros y mirada profunda, se encontraba paseando por los prados cercanos al bosque prohibido. La brisa gélida acariciaba su piel y el susurro del viento parecía cantarle melodías desconocidas. De repente, un murmullo extraño la rodeó, erizándole la piel y llenándola de temor. Intentó ignorarlo, pero la voz en el viento se hacía cada vez más nítida, más demandante.

Elena siguió caminando, pero la sensación de ser observada la perseguía, como si algo la acechara desde las sombras. La voz en el viento le hablaba en un idioma antiguo, desconocido para ella, pero que resonaba en lo más profundo de su ser. Sin poder resistirse, siguió el sonido hasta llegar a un claro del bosque, donde una figura etérea se alzaba entre la neblina, sus ojos brillando con una luz sobrenatural.

La figura se acercó lentamente a Elena, susurros indescifrables escapando de sus labios sin vida. La joven permanecía paralizada, incapaz de apartar la mirada de aquel ser que parecía emanar una oscuridad ancestral. La voz en el viento le ofreció un destino incierto, una promesa de poder y conocimiento que tentaba su corazón vulnerable.

En un acto de valentía o insensatez, Elena tomó la mano de la figura, sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo. En un instante, el mundo a su alrededor se desvaneció, dejándola a merced de la voz en el viento. ¿Qué se ocultaba detrás de aquel ser etéreo? ¿Era acaso un espíritu en pena o algo más siniestro?

El susurro se desvaneció en la noche, dejando a Elena sola en la penumbra del bosque. Se dice que nunca más se supo de ella, que su alma quedó atrapada entre los ecos de la desesperación, condenada a vagar eternamente en busca de redención. Algunos juran escuchar su voz en el viento, pidiendo ayuda, mientras otros prefieren ignorarla, temerosos de caer en la misma trampa mortal.

Así termina esta historia, con la promesa del silencio que envuelve al pueblo perdido en las colinas de Escocia, con la certeza de que hay fuerzas más allá de nuestra comprensión acechando en las sombras, esperando ser liberadas por aquellos que se atrevan a escuchar la voz en el viento. ¿Te atreves tú a enfrentarte a tus propios demonios, a descubrir qué secretos aguardan en lo desconocido?

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