# Introducción: La silla maldita
En un pequeño pueblo rodeado de espesos bosques y neblina perpetua, se alzaba una vieja casa abandonada. La fachada estaba cubierta de musgo y las ventanas rotas permitían que la luz de la luna se colara en su interior. Los lugareños evitaban pasar cerca de ella, pues la leyenda hablaba de su silla vacía, un objeto que atraía desgracias y sombras del más allá.
# Nudo: El oscuro secreto tras la silla
Corría el rumor de que aquella silla había pertenecido a una anciana solitaria que vivió en la casa hace siglos. Se decía que la mujer practicaba extraños rituales con la esperanza de prolongar su vida más allá de lo humano. Nadie sabe qué pasó con ella, pero la silla quedó como testigo mudo de sus oscuros designios.
Una noche, un grupo de jóvenes valientes decidió entrar en la casa y descubrir si la leyenda era real. Entre risas nerviosas, cruzaron el umbral de la morada abandonada y se adentraron en sus entrañas. La silla vacía los aguardaba en el centro de una habitación polvorienta, como si supiera que su momento de gloria estaba por llegar.
Uno a uno, los jóvenes se sentaron en la silla, desafiando a las sombras que danzaban a su alrededor. Pronto, comenzaron a escuchar voces susurrantes y a sentir fríos que helaban sus huesos. El terror se apoderaba de ellos mientras la silla parecía absorber su energía vital, como si quisiera devorar sus almas para alimentar su sed de venganza.
# Desenlace: El silencio eterno
Al amanecer, solo quedaba una silla vacía en aquella habitación olvidada. Los lugareños encontraron los cuerpos sin vida de los jóvenes, con expresiones de horror grabadas en sus rostros. La silla había reclamado su tributo, cobrándose las vidas de aquellos que osaron desafiarla.
Desde entonces, la casa abandonada se convirtió en un lugar maldito, donde la silla vacía sigue aguardando a nuevos incautos que se atrevan a desafiar su poder. Los pobladores del pueblo evitan pasar cerca de ella, temerosos de despertar la furia de un objeto poseído por fuerzas oscuras más allá de toda comprensión.
El misterio de la silla vacía perdura en el tiempo, susurros de tragedia y desolación que se propagan entre los valientes que intentan desentrañar su secreto. ¿Quién fue la anciana que la creó? ¿Qué poderes malignos encierra en su madera marchita? La respuesta quizás nunca sea revelada, perdida en las sombras de la noche eterna que envuelve aquel lugar maldito.