Introducción: El puente que desaparece
En lo profundo de un denso bosque, rodeado de un aire húmedo y pesado, se alzaba un antiguo puente de piedra que cruzaba un río serpenteante. Aquel puente, conocido por los lugareños como «El puente maldito», era temido y evitado por todos aquellos que habitaban en los alrededores. Se decía que el puente tenía un oscuro secreto, que cada cierto tiempo desaparecía misteriosamente, llevándose consigo a aquellos que osaban cruzarlo en ese momento.
Nudo: La sombra del terror
Una noche, bajo la pálida luz de la luna, tres jóvenes amigos decidieron desafiar la leyenda y aventurarse a cruzar el puente maldito. Ignorando los consejos de los lugareños, se adentraron en el bosque, sintiendo cómo el ambiente se volvía cada vez más opresivo conforme se acercaban al puente. A medida que avanzaban, el sonido del agua del río parecía susurrarles advertencias de peligro.
Al llegar al puente, una sensación de malestar los invadió, pero el ansia de aventura los impulsó a continuar. Con paso vacilante, comenzaron a cruzar el puente de piedra, con cada paso resonando en la quietud de la noche. De repente, un espeso banco de niebla los envolvió, ocultando el resto del camino y sumiendo al grupo en una oscuridad sobrecogedora.
Cuando la niebla se disipó, los jóvenes se encontraron en medio de un paisaje desolado y desconocido. El puente había desaparecido, dejándolos atrapados en un lugar siniestro y amenazante. Sin ninguna señal de vida a su alrededor, sintieron el frío de la incertidumbre calándoles hasta los huesos.
Desenlace: La verdad oculta
A medida que exploraban su entorno, los jóvenes descubrieron que estaban atrapados en un extraño limbo entre la realidad y la fantasía. El puente que habían cruzado los había transportado a un lugar donde las leyes de la naturaleza parecían retorcerse y deformarse ante sus ojos.
Conforme pasaban las horas, las sombras del bosque cobraban vida, susurros inquietantes llenaban el aire y figuras indistintas se movían entre los árboles. La sensación de que algo oscuro los observaba acechaba en cada rincón, haciéndoles temer por sus vidas.
Sin saber cuánto tiempo habían estado allí, los jóvenes decidieron emprender un último intento por encontrar una salida. Siguiendo el curso del río, llegaron a un claro donde se alzaba un enigmático arco de piedra, que brillaba con una luz sobrenatural.
Al acercarse al arco, una voz resonó en sus mentes, advirtiéndoles del peligro de intentar cruzarlo. Con el corazón en un puño, los jóvenes se miraron entre sí, sabiendo que debían tomar una decisión que marcaría sus destinos para siempre.
Y así, en un acto de valentía y desesperación, cruzaron el arco de piedra, adentrándose en lo desconocido y dejando atrás el misterioso puente que desaparece, cuya historia viviría para siempre en los susurros del bosque.
El resto es un enigma, una incógnita sin resolver que quedó suspendida en el aire, permitiendo a los lectores imaginar los destinos de aquellos jóvenes y reflexionar sobre los oscuros secretos que yacen ocultos en lo más profundo de la noche.