# Introducción: El susurro en la oscuridad
En un pequeño pueblo rodeado de densos bosques, se contaba una leyenda que helaba la sangre de los lugareños. Se decía que cada vez que el reloj marcaba la medianoche en la vieja mansión abandonada de la colina, se escuchaba un sonido inquietante: el sonido del rasguño. Aquellos valientes que se aventuraron a acercarse a la casa nunca volvieron a ser los mismos, algunos desaparecieron sin dejar rastro, otros enloquecieron y pocos lograron sobrevivir para contar la historia.
# Nudo: La puerta al infierno
Una noche oscura y tormentosa, tres amigos decidieron desafiar a la oscuridad y explorar la mansión embrujada. Ignorando las advertencias de los ancianos del pueblo, se adentraron en la casa con linterna en mano y corazones llenos de temor. A medida que avanzaban por los pasillos polvorientos, el sonido del rasguño resonaba en sus oídos, haciéndoles sentir un escalofrío que les erizaba la piel.
Decidieron seguir el rastro del sonido, guiados por una fuerza desconocida que los empujaba hacia lo desconocido. Al llegar a una puerta de madera carcomida, el sonido del rasguño se intensificó, como si algo o alguien estuviera tratando desesperadamente de salir de su prisión. Con manos temblorosas, uno de los amigos giró el picaporte y la puerta se abrió lentamente, revelando una habitación en penumbras.
En el centro de la habitación yacía una caja de madera antigua, cubierta de extraños símbolos y con un candado oxidado. El sonido del rasguño provenía de su interior, como si algo estuviera atrapado dentro, esperando ser liberado. Sin pensarlo dos veces, uno de los amigos rompió el candado y abrió la caja, desvelando un oscuro secreto que los dejaría marcados para siempre.
# Desenlace: El pacto con lo desconocido
Dentro de la caja yacía un espejo antiguo, cuyo reflejo parecía distorsionado y grotesco. Sin previo aviso, una figura sombría emergió del espejo, envuelta en sombras y emanando un aura de malicia pura. Los amigos contemplaban horrorizados mientras la figura se materializaba frente a ellos, sus ojos brillando con una luz sobrenatural.
Entonces, la figura habló con una voz que resonaba en sus mentes, prometiéndoles riquezas y poder a cambio de un pacto siniestro. Seducidos por la promesa de un futuro mejor, los amigos aceptaron el trato sin dudarlo, sellando su destino con sangre y oscuridad.
Al amanecer, la mansión abandonada había desaparecido sin dejar rastro, dejando únicamente a los tres amigos parados en medio de la nada, con el eco del sonido del rasguño retumbando en sus mentes. ¿Habían hecho un pacto con lo desconocido? ¿O simplemente habían sucumbido a la locura que acechaba en las sombras?
El sonido del rasguño seguía resonando en la lejanía, recordándoles que el mal acechaba en cada rincón de la noche, esperando su próxima víctima. Y así, la leyenda de la mansión abandonada cobró vida una vez más, alimentando el miedo y la intriga de quienes se atrevían a escuchar su oscuro susurro en la oscuridad. La verdad quedaba oculta en las sombras, donde solo aquellos valientes o insensatos se aventuraban a explorar.
