Había una vez un grupo de amigos que compartían una pasión por los videojuegos y, en particular, por Minecraft. Su obsesión por los creepypastas los llevó a buscar el famoso mod de Slenderman. Después de horas de búsqueda, finalmente encontraron un servidor oscuro y misterioso que afirmaba tener el mod.
Intrigados y emocionados, los amigos se unieron al servidor. Como equipo, se embarcaron en una búsqueda conjunta para encontrar a Slenderman. Encontraron pistas dispersas por el mundo del juego, símbolos extraños y susurros escalofriantes que los guiaban hacia su objetivo.
A medida que avanzaban, la atmósfera del juego se volvía más opresiva y siniestra. Los árboles parecían retorcerse y los pasillos se alargaban de manera interminable. La tensión aumentaba con cada paso, pero se apoyaban mutuamente, convencidos de que podían superar cualquier desafío.
Finalmente, en lo más profundo del juego, se encontraron cara a cara con Slenderman. Su figura alta y sin rostro se cernía sobre ellos, y su presencia era abrumadora. Antes de que pudieran reaccionar, una fuerza invisible los lanzó en diferentes direcciones.
Cada uno de los amigos quedó solo en una pesadilla personalizada. Slenderman los perseguía implacablemente a través del juego, apareciendo en cada esquina y cada sombra. Los amigos intentaron resistirse, pero Slenderman era implacable y su influencia se extendía más allá de la pantalla.
A medida que los amigos se debilitaban, sus vidas reales también se desmoronaban. Su salud comenzó a deteriorarse, experimentando insomnio, alucinaciones y parálisis del sueño. La línea entre el juego y la realidad se volvió borrosa, y sus vidas se convirtieron en una pesadilla constante.
Un día, uno de los amigos desapareció por completo, su cuerpo nunca fue encontrado. Los demás se dieron cuenta de que habían desatado algo más allá de su control. Decidieron abandonar el juego, pero Slenderman no estaba dispuesto a dejarlos ir.
Atrapados en un mundo de pesadillas, los amigos lucharon por su supervivencia, sabiendo que el precio de jugar con la oscuridad era mucho más alto de lo que jamás habían imaginado.
El tiempo pasó y la vida real de los amigos se convirtió en una pesadilla constante. Slenderman los perseguía implacablemente, apareciendo en las sombras de sus vidas diarias. Cada esquina oscura, cada rincón abandonado se volvía una trampa mortal donde Slenderman acechaba.
Las alucinaciones se volvieron más intensas, y los amigos apenas podían distinguir entre la realidad y las visiones aterradoras que Slenderman les imponía. Sus amigos y familiares notaron el cambio en ellos, pero cualquier intento de ayuda resultaba inútil. Slenderman se había apoderado de sus mentes y no tenía intención de liberarlos.
Una noche, mientras uno de los amigos estaba solo en su casa, las luces comenzaron a parpadear y los susurros inquietantes llenaron el aire. Slenderman emergió de las sombras, sus tentáculos negros envolviendo al amigo, y lo arrastró hacia la oscuridad. Nunca más se le volvió a ver.
Los dos amigos restantes, aterrados y al borde de la locura, se reunieron para intentar poner fin a esta pesadilla. Investigaron frenéticamente sobre Slenderman y descubrieron una leyenda urbana que hablaba de una antigua forma de enfrentarlo: un antiguo ritual que debía realizarse en el mundo de Minecraft para sellar a Slenderman en el juego y liberar sus mentes en la vida real.
Decididos a arriesgarlo todo, regresaron al mundo de Minecraft, donde los horrores los aguardaban. Durante días, se sumergieron en el juego, resolviendo enigmas, enfrentando aterradoras criaturas y buscando los elementos necesarios para el ritual. Cada vez que se acercaban al éxito, Slenderman aparecía para desafiarlos, pero esta vez estaban mejor preparados.
Finalmente, llegó el momento del ritual. En el mundo de Minecraft, colocaron los objetos según las antiguas indicaciones y recitaron las palabras ancestrales. Slenderman se retorció y luchó por evitar su encierro, pero era demasiado tarde. Fue sellado en el juego, atrapado por la eternidad en el mundo digital.
Cuando el ritual concluyó, los amigos sintieron un peso levantarse de sus hombros. Las alucinaciones se desvanecieron, y sus mentes se aclararon gradualmente. Habían logrado sobrevivir a una pesadilla indescriptible y liberarse del control de Slenderman.
Pero su victoria había llegado a un gran costo. Uno de sus amigos había desaparecido para siempre, y sus vidas nunca volverían a ser las mismas. Juraron nunca volver a jugar con el mal de esa manera y vivir el resto de sus vidas con el oscuro secreto que compartían, sabiendo que, en el mundo de Minecraft, Slenderman seguía acechando, esperando el momento adecuado para escapar y buscar venganza.
Comentarios ()